Shuli Sadé es una artista multidisciplinaria, nació en Israel pero vive en Nueva York desde hace años. Trabaja diversos medios como fotografía, video, dibujo, escultura, instalación, realidad aumentada y arte público. Ha participado en diversas exposiciones individuales a nivel internacional, así como intervenciones de arte público; lo más reciente fue una intervención de realidad aumentada en los jardines de Montefiore. En 2014, recibió la Beca de la Fundación Pollock Krasner.
Shuli Sadé experimenta con la idea de la memoria codificada y difumina las dicotomías de la percepción y la realidad. Partiendo de fotografías urbanas que ella misma toma, extrae una amplia gama de datos originales de las mismas y crea un sistema de celdas de memoria similares a las estructuras de un circuito electrónico, generando una plataforma de complejos patrones que hacen referencia a los patrones de la memoria. Shuli toma estos patrones, los amplía y reorganiza en sus obras generando nuevas piezas.